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Foto del escritorHuellitaz y Apapachos

Peluches: la importancia que tienen en la vida de tus hijos




Cuando hay un niño en casa, todos se emocionan y comienzan a consentirlo. Y por supuesto, una de las primeras formas de darles amor es regalándoles un juguete o peluche. En general, la mayoría de los niños tienen varios peluches e incluso les gusta dormir junto a ellos o salir a pasear abrazándolos.


Aunque muchos creen que los peluches no son lo mejor para los bebés, lo cierto es que es todo lo contrario. La presencia de los peluches en los primeros años de un pequeño es una importante medida para ayudarlos en su desarrollo y crecimiento, pues les permiten mejorar el sentido del tacto, sus relaciones sociales y les ayuda en su proceso de independencia de los padres.

¿Y esto cómo es posible?, pues la importancia de los peluches para tus hijos se encuentra en el apego o afecto que los chicos crean hacia estos objetos en los momentos en los que mamá o papá no están cerca.

Los niños asocian sus peluches con algo positivo. La suavidad de su textura, la sonrisa dibujada en sus rostros, al igual que los grandes ojos, les dan una sensación de seguridad o compañía con la que pueden sustituir a sus papás cuando se encuentran solos en un determinado instante.

Aproximadamente a los ocho meses de nacidos, es cuando los bebés inician la etapa de concientización de que sus madres y ellos no son la misma persona, lo que puede producirles ansiedad o sensación de inseguridad debido a la separación, ya que se sienten de algún modo indefensos y vulnerables (sentimientos que poco a poco van desapareciendo con el tiempo). Es allí cuando los peluches entran en su nivel de importancia.

El peluche puede considerarse como un objeto transicional, es decir, un objeto que les ayuda durante el proceso de cambio para superar los sentimientos de la independencia. El peluche acompaña al niño y le recuerda a su madre.

La separación de mamá es un proceso totalmente natural y por ende, normal. Y esa necesidad del pequeño por tener un objeto al cual apegarse durante esta etapa no debe ser un motivo de preocupación para ningún padre, sino todo lo contrario, ya que indica una señal de autonomía en su hijo. Esto establece que logra asimilar positivamente las situaciones de angustia y se adecúa a los acontecimientos.

El apego por los peluches no es eterno. Algunos niños lo tienen hasta los 3 años, en otros se extiende algo más llegando inclusive hasta los 6. Luego de este periodo, ellos poco a poco se van separando de sus muñecos. Cuando ya los dejen de lado, no quiere decir que haya que quitárselos, pues el afecto especial hacia ellos siempre existirá.

La elección

Ciertamente, los pequeños tienen más de un peluche, es por esto que a veces les cuesta decidir por uno solo en específico, por lo que van cambiando frecuentemente por otros que les vayan llamando más la atención, ya sea porque otro le parece más divertido, llamativo o porque es más nuevo del que ya están acostumbrados.

Sin embargo, aunque pasen por varios modelos y tamaños, de alguna forma siempre encuentran su peluche favorito, el cual termina siendo el elegido para la compañía del sueño, para sus ratos de juegos o cuando mamá y papá dicen que solo pueden llevar uno a pasear.

Entre los muchos tamaños, colores y formas de peluches que existen, los ositos son los más comunes y preferidos ya que tienen un efecto de ternura y tranquilidad, sin embargo también hay muchas opciones como perritos, conejos, gatitos que pueden resultar una buena alternativa.


Lo mejor es escoger peluches de tamaño pequeño o mediano que puedan ser sostenidos cómodamente por los chicos.

Por lo tanto, los peluches logran que los niños desde muy pequeños tengan un grado de confianza en ellos mismos, además de que les ayudan en ese inicio del desarrollo de sus habilidades emocionales, sociales y en su creatividad.

Por otro lado, promueven la expresión de deseos, inquietudes, temores y alegrías. Y como ya mencionamos anteriormente, el tacto, que es uno de los más importantes sentidos del ser humano, se comienza a fomentar con los peluches. La suave textura les genera endorfinas, proporcionando alivio a tu hijo.

¿Quieres añadir algún peluche a la vida de tu pequeño? Echa un vistazo a nuestra sección de Peluches y  elige tu favorito.

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